Cada vez es más habitual que la mayoría de comunicaciones se realiza a través de correo electrónico, no solo entre particulares, sino también con empresas, administraciones públicas, organizaciones del tercer sector, etc… Es por ello que cada vez resulta más necesario traer al procedimiento este tipo de comunicaciones, cuestión que en la mayoría de los casos, no hacemos correctamente.
Si utilizamos como punto de partida la definición de documento electrónico que se hace en el artículo 41 y siguientes del Real Decreto 1671/2009, de 6 de noviembre, por el que se desarrolla parcialmente la Ley 11/2007, de 22 de junio, de acceso electrónico de los ciudadanos a los servicios públicos, serán requisitos imprescindibles para considerar válido un documento electrónico trasladado a un tercero por medios electrónicos:
- Contener información de cualquier naturaleza archivada en un soporte electrónico según un formato determinado susceptible de identificación y tratamiento diferenciado.
- Disponer de los datos de identificación que permitan su individualización, sin perjuicio de su posible incorporación a un expediente electrónico.
- Incorporar una referencia temporal del momento en que han sido emitidos.
- Incorporar los metadatos mínimos exigidos.
- Incorporar las firmas electrónicas que correspondan de acuerdo con lo previsto en la normativa aplicable.»
En un litigio el correo electrónico se considera un documento privado, al que se le aplica el artículo 326 de la Ley de Enjuiciamiento Civil. Eso implica que si la parte que se pueda ver perjudicada por su contenido no impugna su autenticidad, será prueba en el proceso.
Para su mejor ante el juzgado, y siguiendo los consejos que nos ofrece el compañero David Maeztu, recomiendo lo siguiente:
- Presentar todos los correos en soporte digital (CD) y los más importantes en formato impreso (PDF, Texto, etc…); debiendo ambos constar en formatos comprensible para los ordenadores de los juzgados.
- Indicar la “huella” de los archivos aportados para asegurar a todas las partes en el proceso que la información que se acompaña a los archivos es exactamente la misma.
Si deseas, puedes consultar tu caso sin ningún compromiso a través de nuestro formulario de contacto.