¿Qué es una cláusula de confidencialidad?
Podemos definir una cláusula o pacto de confidencialidad cualquier condición laboral por la que trabajador y empresa acuerdan mantener en secreto o no revelar cierta información de la empresa. Con carácter general, aparecerá por escrito en el contrato de trabajo, aunque también puede pactarse en otro momento de la relación laboral y anexarse al contrato. Aunque el trabajador puede negarse, los efectos pueden ser similares ya que el trabajador está obligado a ciertos deberes de sigilo, pudiendo dar lugar a responsabilidades civiles o incluso penales.
Requisitos de la cláusula de confidencialidad
Generalmente hay cuatro aspectos esenciales a tener en cuenta en este tipo de cláusulas, que siempre es recomendable se recojan por escrito a efectos de aclarar su interpretación:
- Objeto: Es recomendable definir al máximo lo que se considera como información confidencial, aunque generalmente se entiende como tal elementos tale como datos financieros, procesos y métodos de trabajo, conocimientos sobre productos, información de clientes y proveedores, etc… En sentido contrario, serán considerados información reservada los conocimientos que se tuviesen antes de acceder al puesto de trabajo o que se conozcan por otro medio legítimo.
- Duración: Generalmente va a estar determinada por la duración del propio contrato, aunque es posible que incluya también un periodo posterior a la finalización del mismo.
- Remuneración: Aunque la existencia de dichos pactos se entiende de carácter gratuito, la empresa puede en determinados casos establecer un complemento salarial atendiendo al nivel de sigilo que el puesto exige.
¿Me puedo negar a firmar la cláusula?
Aunque el trabajador se niegue a firmar este tipo de condiciones, el efecto en caso de incumplimiento es el mismo. Esto se debe a que todo trabajador, por el mero hecho de serlo, tiene la obligación de no difundir información relevante interna de la empresa; de acuerdo con el principio de buena fe.
Por este motivo es imprescindible que el trabajador conozca, por parte de la empresa y de un modo que no ofrezca dudas, las obligación que le son aplicables sobre el secreto de la información.
¿Qué ocurre si se incumple la cláusula de confidencialidad?
Las consecuencias dependerán de cuando se produzca el incumplimiento. Si se incumple durante la vigencia del contrato laboral, la empresa podrá imponer una sanción al trabajador o, si la falta es de suficiente entidad, proceder a un despido disciplinario.
Si el incumplimiento se produjera una vez extinta la relación laboral, el empresario podrá solicitar judicialmente una indemnización por los daños y perjuicios causados o incluso acudir a la vía penal si se hubiera producido un delito contra la propiedad intelectual o industrial.
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